Amigo Incal:
Es increíble la cantidad de mensajes, postales, consejos y demás yerbas que he recibido en mi e-mail por ser año nuevo. He aquí un ejemplo de uno de ellos:
Espero que hayas pasado muy bien este fin de año y
hayas empezado este Año Nuevo mucho mejor.
Yo la pasé con mi familia y la familia de mi esposa
muy lindo en la Costa de Argentina pero comí mucho :)
Como yo, mucha gente se fija metas para año nuevo.
Objetivos. Cosas que quieren lograr. Cosas que quiere cambiar.
En sintesis, tener un Año Nuevo. Una Vida Nueva.
Un Nuevo Trabajo. Un Nuevo Cuerpo.
Un Nuevo Nivel de Ingresos. Una Nueva Relación.
Un Nuevo _________________ (llénalo con lo que tu quieras.)
Y si las logra, eso es un Año Nuevo.
Si no las logra, es solo la repetición del Año anterior.
¿Pero cuantas veces lograste eso que querías al año siguiente?
---> Por eso cree esto(aquí va un linK para abrir)
Es mi producto mas barato y mas completo. Lo puedes solicitar y no te arrepentiras.
Si, así de una, sin mas vueltas desaparece toda la pseudo-cordialidad y aparece sin tapujos el ávido vendedor de ilusiones, ofreciéndome” como lograr dominar mi dialogo interno para atraer lo que yo quiera” por unos pocos dólares.
Quizás sea bueno aclarar que en otros tiempos, cándidamente me proponía determinados objetivos a comienzos de año nuevo ,pero irremediablemente descubrí que cuando me proponía adelgazar algunos kilos de mas, el resultado era atroz, porque créanme me di cuenta que lo que mas nos hace engordar es el itinerario por distintas dietas.(esto no es una ocurrencia mía ,esta comprobado por médicos y expertos que paradójicamente el carrusel de “dietas” hace que después se recobren los kilos perdidos sumándoseles varios mas)
Por eso ahora he decidido por lo simple, es decir llevar una alimentación sana sin mayores complicaciones…y esto ha dado mejor resultado que miles de super-dietas.
Algo similar me sucedía con objetivos ,un tanto pretenciosos, como el de ser feliz(¿?)
Me empeñaba en ser feliz, pero los resultados eran totalmente contradictorios.
Mas de una vez me descubría con ceño fruncido analizando por qué no lograba ser feliz a pesar de mis bien intencionados esfuerzos, hasta que me di por rendido y exhausto solté riendas y recién allí es que empiezo a conocer un sentimiento muy cercano a la felicidad: la aceptación.
Ojo, cuando digo aceptación, no me refiero a un conformismo mediocre, a una dócil adaptación o a una amarga resignación. Todo lo contrario, aceptar tiene que ver con el dejar de luchar consigo mismo pretendiendo lograr ser “algo” distinto de lo que uno realmente es.
Ahí descubrimos que generalmente ,al igual que el burro con la zanahoria, perseguimos una imagen idealizada de lo que es o debería ser feliz. Al aceptarme y al aceptar a los que me rodean, comencé a tener mayores momentos de felicidad, porque en definitiva de eso (creo yo, me parece) se trata ser feliz: de tener mayores momentos de amabilidad, bienestar, y alegría consigo mismo y con los demás.
Amigo Incal, por lo tanto le deseo a usted para este nuevo año ,nada de grandilocuentes pretensiones , sino tan solo muchos instantes simples de felicidad esparcidos en la rutina cotidiana ,como semillas que darán dulces frutos.
Un abrazo.
Flamel.
Mi querido Flamel:
A mi correo también me han llegado mensajes de feliz comienzo de fin de año.
El más singular es este poema que dice así:
Soy el Año Nuevo, vengo a ti puro e inmaculado; acabo de salir de las manos de Dios. Cada día es una perla de gran precio que te es concedida para que la ensartes en el hilo de plata de la vida. Una vez ensartada, ya no puede desenhebrarse jamás; queda allí como un testimonio inmortal de tu fe y de tu destreza. Debes fundir entonces, cada minuto, como eslabón dorado a la cadena eterna de las horas.
No diré el nombre del autor de dicho poema, por aquello que se dice el pecado pero no el pecador. A veces los poetas, querido Flamel, intentando emocionarnos llegan a las más altas cumbres de la ridiculez. ¿Por ejemplo, puede usted imaginarse a Dios sacando de sus manos al año nuevo, como si se tratara de un bollo recién horneado?
Siguiendo con la lectura del poema nos encontramos con la simpática metáfora de ver cada día como una valiosa perla…pero a continuación, aparece una expresión que rompe todo el clima: para que la ensartes en el hilo de plata de la vida.
Convengamos que el verbo ensartar no es del todo feliz.
Tanto aquí en este poema como en muchísimos otros contextos, no es fácil de conjugar, sin que provoque socarrones comentarios.
Es un verbo, que como diría mi abuelo Toribio, “da para la chacota” o como diría mi abuela Doña Ramona “es cosa de guarangos"andar diciendo esas cosas. Pero hete aquí que en su arrebato poético el autor se olvida del mínimo buen gusto y como si no bastara con una sola mención arrebate una vez mas diciendo: Una vez ensartada, ya no puede desenhebrarse jamás; queda allí como un testimonio inmortal de tu fe y de tu destreza.
(Sin comentarios, hagamos un minuto de silencio: la belleza ha sido asesinada por un desubicado poeta)
Así es amigo Flamel ,no es común recibir saludos de fin de año inteligentes y sensibles, pero que existir, existen.
Por suerte tuvimos la bendición de recibir otra clase de saludos como es la de nuestra amiga Reina http://reinadebuenosaires.blogspot.com/ que amablemente nos envió estas tarjetas donde con transparente simplicidad nos desea lo mejor.
Que nunca falte gente como ella!!!!
Feliz año nuevo!!!!